Luces bajas, noche encendida, Tu silueta es fuego que da vida. En tus ojos veo mi destino, Mamacita, tú eres mi camino. Tus pasos lentos vienen hacia mí, Y mi alma empieza a latir. No digas nada, solo ven acá, Tu cuerpo habla y me hace vibrar. En esta noche no hay por qué correr, Lo que sentimos no se puede esconder. Tus labios llaman, no puedo negar, Estoy listo para me entregar... Mamacita, ven a amarme, amore, Tu piel me enciende, me devora sin pudor. Cada caricia tuya es bendición, Tú y yo bailando hasta perder la razón. Mamacita, no me dejes solo, Quédate aquí, que este amor no es de otro. En tu mirada encontré mi lugar, Ven a amarme, amore, sin pensar. El reloj se olvida del tiempo, Cuando te tengo siento el universo. Tus manos dibujan mi corazón, Y yo me pierdo en esta pasión. Nadie nos ve, nadie nos juzgará, Esta noche es nuestra y nada más. Amore, no hay cielo si tú no estás, Ven y haz eterna esta fugaz paz. Mamacita, ven a amarme, amore, Tu piel me enciende, me devora sin pudor. Cada caricia tuya es bendición, Tú y yo bailando hasta perder la razón. Mamacita, no me dejes solo, Quédate aquí, que este amor no es de otro. En tu mirada encontré mi lugar, Ven a amarme, amore, sin pensar. Amarte es volar sin alas, Tocarte es borrar las balas. Del pasado, del dolor, del ayer, Contigo solo quiero renacer... Mamacita, ven a amarme, amore, Que esta pasión no se calle ni se borre. Tómame fuerte, sin explicación, Hazme prisionero de tu corazón.